CRIME DOES NO PAYLev Gleason / Comics House126 números (22-147) 1942 a 1955
Crime Does Not Pay #22, #24, #30, #33 Generalmente considerada como la primera y mejor revista de historietas en Estados Unidos. Publicaciones previas habían mostrado al crimen (
Detective Comics 1 al 26 y mas allá, por ejemplo), pero
Crime Does Not Pay creó un género concentrándose solamente en casos de crímenes investigados en archivos policiales y libros de historia. En ese entonces adaptados por las fenomenales habilidades del escritor y editor
Charles Biro para producir fuertes historias humanísticas, usualmente en el formato de implacables grillas de a nueve paneles que hicieron mucho por sumar al material la sensación de documental.
Crime Does Not Pay #36, #42, #46, #71 Con el co-editor
Bob Wood y su elenco estable de artistas, complementados con los mejores talentos independientes en la industria,
Biro publicó trabajos que rompieron el molde. Impregnado en la filosofía de ese período, y con la tendencia a moralizar, los relatos nunca fueron tan arrogantes como la aparentemente interminable cadena de imitadores a los que inspiraron. El pago que recibían los criminales usualmente tendía a ser la muerte, aún así la mayoría de las historias son frescas y entretenidas y rara vez repetitivas. Durante los últimos años de la década del 40, algunas variaciones en la estructura del dibujo permitieron a artistas del calibre de
Dan Barry,
Norm Maurer,
Joe Kubert e incluso
Frank Frazetta crear muy buenos trabajos, pero las estrellas de las revistas eran los guiones.
Crime Does Not Pay #88, #98, #101, #107 Crime Does Not Pay comenzó su vida como
Silver Streak Comics (1 al 21), un título popular de super-héroes, y debe haber sido una sorpresa cuando
Charles Biro pasó a ser editor en 1942 e inmediatamente tiró lejos el estilo que él llamaba "
Popular Illustories"
(algo así como "Ilustorias Populares"). La táctica dió resultado y las ventas se dispararon. A los tres números, creó otra serie, primero con la introducción del espectral
Mr. Crime (24), un fantasmal, cadavérico narrador quien actuaba como un coro griego, animando a los criminales en sus viles actos, protestando de sus eventuales "grandes errores" y lamentando su inevitable caída. El título fue una antología a lo largo de su vida, a pesar de que algunas presentaciones regulares se incluyeron a fines de los años 40, el mas notable "
Officer Common Sense". También estaba el "
Who Dunnit" de
Fred Guardineer, crímenes reales presentados en el formato de misterios donde el lector era provisto con todos los hechos y se los desafiaba a deducir al perpetrador. Ráramente igualado y nunca sobrepasado en el campo de las revistas de historietas de crímenes, fue la publicación de mas ventas de la editorial (cercánamente seguidas por
Daredevil Comics y
Boy Comics, también producidas por
Charles Biro) por la mayor parte del período post-guerra. Fue también uno de los mayores objetivos de las audiencias de las historietas en el Senado en 1954, citados por los libros
Seduction of the Innocent del
Dr. Frederick Wertham y
Parade of Pleasure de
Geoffrey Wagner. Ellos sentían que contribuían al embellecimiento de los crímenes y la ignorancia de los niños, cargos que son casi insostenibles si las historietas fueran analizadas en la actualidad. La adopción del
Comics Code Authority significó su final, y la revista solo duró seis números mas (142 al 147) antes de su cancelación.
Crime Does Not Pay #123, #131, #139, #147 De 1944 a 1953 hubo un ejemplar anual al estilo "
Lo mejor de...", los cuales incluían cuatro números de las publicaciones del año correspondiente.
Win Wiacek